Encuestadores y pesadas llamadas telefónicas

Esta mañana, yendo a buscar a mi hija al cole me he topado con varias personas que querían hacerme una encuesta y les he tenido que decir que tenía prisa( sorprendentemente era verdad), pero alguna vez me han pillado y no he tenido más remedio que aceptar. En el primer minuto de encuesta parece divertido, a los cinco minutos un coñazo y ya más de ese tiempo mandarías al pobre encuestador a freír puñetas (igual pasa con los que te llaman por teléfono). Se que es un trabajo pero te fastidian un buen rato. Todas las semanas me llaman los de Jazztel, pues les he cogido una manía tremenda y no quiero ni oír hablar de ellos. Creo que con avasallar tanto a la gente lo único que consiguen es publicidad negativa para su empresa. Alguna vez me han llamado a las nueve y media de la noche ¡Pero a donde van a esas horas molestando a la gente! Naturalmente llega un punto que nada más escuchar quienes son los mandas al carajo. A mi es que me llegan a casar de mis casillas y acabo soltando alguna barbaridad por teléfono al trabajador que sólo hace lo que le mandan.